¿Qué este año no podemos hacer una visita al museo de Almería? para nuestro cole no supone un problema porque hemos hecho que el museo venga al cole a través de una video llamada.
Ha sido una experiencia increíble. Hemos podido ver como eran las familias prehistóricas, a que se dedicaban, cuales eran las funciones de cada uno de los miembros de la familia, que representaban las pinturas que hacían en las paredes incluso quienes recolectaban la cosecha y quienes cazaban.
La responsable del museo nos explico que no sólo las mujeres cuidaban de los bebés y que no sólo los hombres cazaban, sino que el trabajo era repartido por todos los miembros de la familia.
Analizamos dibujos, vimos las fases de la Prehistoria, aprendimos los nombres de los objetos y utensilios tanto para la caza como los que utilizaban para comer, incluso nos inventamos como sería un día con nuestra propia familia si nos hubiera tocado vivir en la prehistoria.
El análisis de los dibujos y pinturas rupestres nos sirvió para convertirnos en niños y niñas cavernícolas y realizar nuestras propias obras de arte plasmadas en "piedra". Gracias a la mamá de Pablo que nos dio la idea y nos proporcionó la documentación para poder llevarlo a cabo.
Para poder hacer la "piedra" utilizamos arcilla blanca. Con ella hicimos una bola que luego aplastaríamos hasta obtener una especie de piedra plana de aproximadamente un centímetro de grosor. Para darle un estilo mas propio, ya que las paredes de las cuevas no eran totalmente lisas, cogimos un papel arrugado y le dimos pequeños golpecitos a nuestra arcilla blanca hasta conseguir una superficie menos lisa. Nuestra "piedra la dejamos secar dos días" para que se quedase bien dura.
Mientras se secaba la arcilla hicimos nuestros dibujos en folio, sabiendo que eran borradores, de esta manera podíamos ensayar muchas veces hasta coger un estilo cavernícola.
Una vez seca y dura la "piedra" pasamos a dibujar en ella los dibujos que hicimos en el borrador.
Y ya teníamos nuestra "piedra" lista para empezar a darle color.
Mezclamos pinturas de diferentes colores pero siempre respetando las tonalidades que los prehistóricos utilizaban: naranja, amarillo, rojo, negro y marrón.
En alguna ocasión tuvimos que repasar con rotulador negro los filos de los dibujos ya que al pintar con las pinturas no se notaban demasiado.
Nos ha encantado aprender cosas de la prehistoria y poder dibujar en nuestro trocito de cueva ha sido genial.
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